Todos los años evaluamos nuestra Huella de Carbono Corporativa (CCF) utilizando el inventario de Alcance 1 a 3, de acuerdo con las normas establecidas en el Protocolo de Gases de Efecto Invernadero (GHG Protocol), reconocido en todo el mundo. Este enfoque nos permite evaluar la eficacia de las iniciativas que hemos puesto en marcha y determinar las áreas en las que es necesario intervenir.